Según el informe de la Sociedad Nacional de Minería, entre los meses de octubre y diciembre del 2022 la caída del empleo en el rubro minero fue cerca de los 20.000 puestos de trabajo, lo equivalente a una baja del 6.9% en relación al período anterior.
Entre los meses de julio y septiembre del 2022, la cifra de ocupados alcanzaba los 289 mil, y en los últimos 3 meses, 269 mil, siendo este último el más alto registro histórico.
“Respecto a la medición anterior, se refleja que la ocupación minera cae en 12.000 empleos, esto es 4,3%, mientras que en el país crece 0,9%, generando 82.000 puestos de trabajo”, señaló Álvaro Merino, Gerente de Estudios de SONAMI.
“No obstante, al analizar las estadísticas de ocupación en los últimos doce meses, se aprecian aspectos positivos, por cuanto el empleo en el sector minero crece 13,5%, pues en el trimestre móvil octubre diciembre de 2021 registró 237.000 empleos, y hoy, como se informó, llega a 269.000 puestos de trabajo. En el país, en tanto, el empleo crece 3,3% en los últimos doce meses, es decir, 287.000 nuevas ocupaciones”, agregó.
¿Cuál es la mirada de Fesumin sobre estos números negativos?
El Director de Comunicaciones de la Federación, Víctor Riesco, señaló que “una caída de 20 mil puestos de trabajo en minería es un impacto bastante importante, no solo para las regiones mineras que desarrollan la actividad, si no para aquellas personas que vienen de otros lugares del país para desarrollar parte de los proyectos mineros que están en construcción”.
Riesco afirma que “es un tema sabido que las grandes mineras del país están invirtiendo mucho en lo que corresponde a requerimientos básicos, como es la energía y el agua, principalmente agua desalada, que está llegando a las faenas mineras. Es así como en la primera región, tanto Quebrada Blanca con su proyecto QB2 y ahora Collahuasi con su ampliación C20+ irán por agua desalada para llevarla a la zona de faena ubicada en los distritos de Pica a más de 4.800 metros”.
“Anteriormente, se ha dicho que Codelco utilizará agua desalada en todos sus procesos, a fin de que no necesiten agua continental y que eso favorezca el desarrollo de las faenas impactando de menor forma en cuanto al uso del agua continental. Pero también hay otras figuras que vendrán con los nuevos proyectos, que no siendo de gran minería pueden ser de mediana o pequeña y que activarán en la contratación de personal en las diferentes facetas de los proyectos que se encuentren”, señaló.
“Esperemos que la minería, como gran motor del país, siga entregando esta posibilidad de nuevos puntos de trabajo por un período mucho más largo a través del tiempo”, concluyó.