Chile enfrenta una de las mayores crisis sanitarias de los últimos años, provocada por un brote sin precedentes del virus sincicial. Este patógeno, que se propaga con mayor eficacia en climas fríos, ha cobrado la vida de al menos seis lactantes en el país y ha puesto a prueba la capacidad de respuesta del sistema de salud.
Aunque la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA) ha aprobado recientemente una vacuna para el virus sincicial, esta medida solo cubre a personas mayores de 60 años, dejando a los niños chilenos sin una defensa inmunológica directa contra esta amenaza virulenta.
El Ministerio de Salud de Chile ha dado a conocer cifras preocupantes: un 92% de ocupación de camas críticas en hospitales públicos y privados, junto con 235 traslados pediátricos desde el comienzo de la campaña de invierno. A medida que las temperaturas bajan y otros virus, como la influenza, comienzan a circular, se espera que la presión sobre la red hospitalaria aumente.
El virus sincicial es especialmente peligroso para los niños, en particular para aquellos menores de un año, ya que puede causar una destrucción del tejido pulmonar y conducir a insuficiencia respiratoria. La presencia de una población ampliamente susceptible, una consecuencia indirecta de la pandemia, ha contribuido a la rápida propagación y al gran número de casos detectados por el sistema de salud.
Esto se suma a la época de gripes e influenza que azota al país durante los meses en que llega el frío, es por esta razón que el Gobierno ha instaurado el uso obligatorio de mascarillas en espacios cerrados de establecimientos escolares para profesores y niños mayores de 5 años, para reducir el contagio del virus sincicial y ha ejecutado la campaña de vacunación contra la influenza proyectando la meta de un 85% por grupo objetivo, ya que puede ser grave en adultos.
Llamado a la Prevención
Desde Fesumin, se realizó un llamado a sus socios y socias, y rubro minero en general, a tomar todas las precauciones necesarias para protegerse y proteger a sus seres queridos, tomando acción para prevenir la propagación del virus sincicial y otros más, y acudir a los vacunatorios contra la influenza, para así evitar enfermarse y ausentarse de sus labores.
Fesumin afirma que en este momento crítico, la responsabilidad de cada uno es marcar la diferencia. “Cuidémonos y cuidemos a los demás. Juntos, podemos enfrentar y superar esta crisis sanitaria”, finalizan.