Cuando surge una crisis de cualquier índole, la sensación que se genera en las personas es de plena angustia. Ocurre de forma instantánea, sin previo aviso, y alcanza su máxima intensidad en cuestión de muy pocos minutos, pudiendo prolongarse por más tiempo de lo pensado.
Esto ocurre hoy. El coronavirus nos golpeó y además, nos trajo el temor a perder la vida por esta crisis de salud. Además del miedo a enfermarte, está la posibilidad latente de quedar en la soledad más absoluta que puede experimentar un ser humano; si a todo esto le añadimos la falta de recursos para ir en busca del alimento familiar, el tema se vuelve más caótico y nos enfrentamos a la posibilidad de buscar cualquier fuente de ingreso para poder palear esta situación.
Ante la situación descrita anteriormente, como FESUMIN, que alberga en su base a sindicatos de supervisores de la minería privada en Chile, entendemos la necesidad que existe hoy en las familias que no lo están pasando bien y han tenido que agotar los medios para poder sobrevivir estas semanas de cuarentena, desempleo y hambre.
Es por esto que instamos a los representantes políticos que deben llevar a cabo la votación en el Senado por el retiro del 10% de los fondos de pensiones de los chilenos, que lo hagan convencidos de que es un dinero ahorrado por toda la clase trabajadora, siendo este en su íntegra propiedad de cada chileno que hoy tiene la oportunidad de darle el uso que estime conveniente en relación a las necesidades que hoy imperan.
Dentro de algunos comunicados de nuestros compañeros de diferentes rubros que se refirieron a esta situación destacamos algo muy cierto: “No existe instrumento técnico capaz de señalar quiénes se han visto realmente afectados”. La única vara para medir la necesidad de hoy está a la vista, y cada chileno y chilena sabe qué necesidad suplirá con ese dinero por lo que apoyamos que el retiro debe ser universal.
Hacemos un llamado a los Senadores a votar a favor del proyecto, sin generar más obstáculos al retiro, sin promover discursos que traban la necesidad personal de cada ciudadano de este país. Instamos a analizar la situación antes de hablar y poner trabas al proyecto, porque lo que se diga puede generar más crisis en nuestra sociedad.
Esperamos, que en un corto plazo tengamos la oportunidad de poder cambiar el modelo y reestructurar la forma que rige sobre nuestros fondos y futuras pensiones.
Como organizaciones, debemos ser capaces de trabajar en bloque y ser un ente activo en las mesas de diálogo para tener voz y voto en las decisiones que se toman con nuestros recursos propios y no dejar que cada gobierno de turno realice cambios en forma unilateral sin que los dueños de esos dineros lo sepan: sin que nosotros lo sepamos.
Como FESUMIN, estaremos muy atentos al desarrollo de estas materias. Mientras esto se produzca debemos tener la capacidad de educar y orientar a la ciudadanía, ya que así como conocemos nuestros deberes, también somos responsables de nuestros derechos y debemos aprender a ejercerlos para que nuestras próximas generaciones se empoderen de lo que corresponde.
Un abrazo a cada ciudadano y ciudadana de este país.
DIRECTORIO FESUMIN