Las manifestaciones llevan 6 días en el país y cada vez el llamado social es más fuerte para pedir justicia, equidad y no más abusos en todos los ámbitos de la vida. Partiendo todo con la evasión del Metro por cientos de alumnos de secundaria, hoy el Gobierno reconoce que esta situación se les “escapó de las manos”.
Los dirigentes de Sindicato de Supervisores de Collahuasi están al tanto, comprenden y se unen a las peticiones de la ciudadanía, y su secretario y también Director de Comunicaciones de Fesumin, Víctor Riesco, afirma que los dirigentes deben parte de la solución que el país necesita hoy.
“Lo primero que debemos reconocer es que Chile ha tenido un cambio radical en estos días. De un día para otro esto pasó de evasión a ser una manifestación nacional por justicia y una reforma al sistema que hoy rige Chile y que ha sido impuesta por los diferentes gobiernos que ha tenido el país después de la dictadura”, parte Riesco.
“Es muy importante resaltar que estas protestas y malestar social ha ido escalando desde los estudiantes por el alza del metro, que lo más probable no los haya afectado a ellos, sino que a sus padres y a sus abuelos y que fue derivando en situaciones de protestas que han tenido dos vertientes: una pacífica que ha demostrado que la gente realmente, está en contra de lo que está sucediendo a nivel país, dado todos los abusos y la condición que va en contra de ellos como ciudadanos. Y la otra, ha hecho relucir lo peor de nuestra sociedad y ha hecho ver lo escondido con aquellas malas costumbres de asaltar, robar y promover la violencia a una escala que hace muchos años no se veía”, agrega.
“Desde el Sindicato y desde Fesumin, tenemos una postura clara como profesionales y como personas del mundo minero. Estamos con una postura en donde la solución social no pasas por un enfrentamiento directo sino que por el aporte de ideas. Esto tiene que ser parte del rol que tenemos como dirigentes, que es tomar el conocimiento y educación y ponerla a disposición del país”, afirma Riesco.
Para Riesco, los trabajadores de la minería han sido un aporte económicamente para el desarrollo del país, y es por ello que tienen la responsabilidad de ser parte de este proceso y acompañar a quienes reclaman una sociedad más justa.
“Creemos que el país ha cambiado y toda la ciudadanía debe estar unida en esta petición. Aunque hay que reconocer que el lumpen y el vandalismo ha superado a las fuerzas policiales y al ejército que han reprimido a todos por igual. Esperamos que esta situación mejore y reiteramos que estamos disponibles para trabajar en la solución que necesita el país”, finaliza.
