Las negociaciones entre Minera Candelaria y el Sindicato Mina están en un delicado momento tras más de tres semanas de huelga legal, una instancia a la que llegaron los trabajadores al considerar insuficientes las ofertas realizadas por la compañía.
En medio de este escenario, el recién pasado sábado, la empresa hizo entrega de una nueva oferta mejorada al Sindicato Mina, la que fue recepcionada por el gremio. Los trabajadores tienen hasta el miércoles 4 de noviembre para entregar una respuesta.
En esta nueva oferta, la suma de beneficios (bonos y asignaciones mensuales), equivalen al 2 por ciento del sueldo base promedio de un trabajador del Sindicato Mina, el que va de 1,4 hasta dos millones de pesos. Los bonos de estudios, tanto de los niveles Básica como Universitaria, subirán del 11% al 31%. Por otro lado, el bono de término de conflicto, quedó en 13,5 millones para una negociación que tendría un período de 24 meses.
Respecto a la gratificación legal, la empresa aseguró que ahora será garantizada, mientras que se agregó un bono por buenas prácticas operacionales para quienes cumplan con programas de entrenamiento, comunicación y además promuevan el mejoramiento continuo.
Los últimos días no han estado exentos de polémicas, pues los trabajadores estaban preocupados por los beneficios educacionales conseguidos en negociaciones anteriores, pues se dijo que este beneficio no iba a ser cancelado si los trabajadores seguían en huelga.
El Sindicato de Supervisores salió a aclarar esta situación por medio de un comunicado en el que advierte que “los beneficios cuyo pago se suspende con ocasión de Huelga son solo aquellos que se obtienen a cambio del trabajo cotidiano, como por ejemplo el sueldo base o los bonos por trabajar y producir en los días que se hace efectiva la huelga”.
Asimismo, se han tomado medidas extremas como la del Presidente del Sindicato Mina, Patricio Gárate Flores, que se encadenó en el acceso principal a Candelaria debido a los desacuerdos en una huelga que inició el 8 de octubre.
Los trabajadores deberán ahora evaluar esta nueva protesta para decir sin continúan con la radicalización del movimiento o si deponen la huelga legal.
La empresa, además, pidió que se deje de lado la toma de caminos públicos como privados pues estima que se pone en riesgo la seguridad de los trabajadores, como ocurrió la semana pasada cuando una ambulancia de la Asociación Chilena de Seguridad no logró pasar por las movilizaciones.
