Las federaciones de trabajadores y de supervisores de Codelco están sufriendo una crisis de representación, ya que los afiliados han sentido que sus derechos han sido pasados a llevar por las dirigencias. En este sentido, ¿qué tanto impacto tiene en los trabajadores que no se respeten las bases?
El primer caso es el de la Federación de Trabajadores del Cobre, la FTC, que agrupa a los 27 sindicatos de trabajadores de Codelco.
La tensión en la federación se produce porque el Sindicato de Trabajadores de Chuquicamata anunció un paro para esta semana y solicitó a la FTC el apoyo y extensión del paro a todos los yacimientos de Codelco. Petición que fue negada por la FTC, dejando a los trabajadores con malestar y sentimiento de poco respaldo. Ello determinó que el Sindicato Número 3 Chuquicamata se retirara de la Federación.
“Hay un malestar en el norte por lo que está pasando, porque la federación no se hizo cargo del acuerdo de 2013, ratificado en 2015, que si la empresa desvincula a un trabajador por el artículo 161, la federación paraba. Ellos no están asumiendo el compromiso…”. explicó Rolando Milla, presidente del Sindicato 3 de Chuquicamata.
La paralización de los sindicatos 1,2 y 3 se realizaría durante esta semana, y por el momento sin mayores muestras de apoyo por parte de la FTC, quienes convocaron a un nuevo ampliado de presidentes para el 17 de julio.
Cabe recordar que el primer quiebre de la FTC fue la remoción de Raimundo Espinoza, histórico presidente de la federación y actual Director de Codelco en la representación de los trabajadores, por crisis de representatividad. Polémica dividida por los comentarios de legitimidad de las votaciones para la remoción ya que Espinoza tiene apoyo y retractores. Estos últimos quienes lo acusan de corrupto y “vendido” a Nelson Pizarro.
Otro de los quiebres fue el ocurrido hace un par de semanas en la Federación de Supervisores del Cobre, Fesuc, cuando los supervisores de El Teniente abandonaron la federación.
La causa, según explicó el presidente del SISET, Cristian Aracena, fue que “desde hace varios años los canales de diálogo entre la administración superior de Codelco y Fesuc se encuentran sin acercamiento y todo eso repercute y afecta a nuestros supervisores”…“Esperamos provocar la salida de otros sindicatos que componen la Fesuc y formar una nueva federación, enfocada en el respeto, el diálogo y en el tecnicismo de las conversaciones”.
El problema y las diferencias con la directiva de Fesuc, incluido Ricardo Calderón, su presidente, se agudizó en las últimas elecciones, para las cuales, se reformaron los estatutos y permitieron que dirigentes que no contaban con el apoyo de sus sindicatos base puedan ser parte del consejo sin ese requisito.
Por ello, desde los sindicatos de supervisores de Ministro Hales y de Casa Matriz, presentaron un reclamo ante el Segundo Tribunal Electoral de la Región Metropolitana, en el cual solicitaron dejar sin efecto las elecciones efectuadas el 7 de junio.
“Se inscribió como candidatos a Wilson Álvarez, Cristian Hernández e Ignacio Pino, sin consultar ni respetar los procedimientos (…), situación que nos pareció de extrema gravedad (…) se vulneraron los estatutos y procedimientos de Fesuc”, dice el escrito.
Por su parte, desde El Salvador, el presidente del sindicato de supervisores, Rodrigo González, señaló que “”efectivamente la Fesuc tiene un problema, pero nosotros tuvimos una asamblea esta semana y la idea es tratar de resolver los problemas y trabajar en forma conjunta la problemática que tienen los supervisores, que es básicamente una política laboral en contra de los sindicatos, y creo que la mejor manera de abordar esa política, antisindical de la actual administración de Codelco, es estando unidos”.
Asimismo, se refirió a la posibilidad de dejar la Fesuc y crear una nueva federación, pero a nivel de divisiones. “Creemos que el poder está muy centralizado en algunas personas, en algunos comités ejecutivos de ambas federaciones, por lo tanto nuestra propuesta ideal en un futuro a mediano y largo plazo es formar federaciones en cada división”, argumentó González.
Desde la Federación de Supervisores de la Minería Privada, Fesumin, estos casos sirven para aprender. Al respecto, su Encargado de Comunicaciones, y también Secretario del Sindicato Número 2 Supervisores de Collahuasi, Victor Riesco, señala que: “Estos casos son la prueba de que la representatividad de las bases es lo primordial. Los socios deben sentir, saber y estar respaldados por las directivas y éstas tienen la responsabilidad de ejercer acciones en pro, siempre de los trabajadores, y no de los intereses propios”.
“Esperamos que las diferencias internas, que suelen existir en todas las organizaciones, no perjudiquen a los trabajadores, y que no se tornen una opción de aprovechamiento de las empresas al ver la falta de unión, o los quiebres que se pueden provocar. Alentamos a nuestros colegas a mediar soluciones y a resolver mayores inconvenientes de forma interna, mediante el diálogo y priorizando el bienestar de los trabajadores”, finaliza.