Trabajadores disidentes de Escondida negociarían por su parte con la empresa

Si bien el grupo de trabajadores que busca levantar un nuevo sindicato no logró captar el número de adherentes mínimo para dejar constituida la organización en un primer plazo, habría acercamientos con la empresa para una eventual negociación colectiva anticipada.

 

En la votación del pasado martes 20 de febrero, los líderes disidentes al Sindicato Nº1 no lograron reunir el número necesario de firmantes para constituir el nuevo referente gremial, por lo que las inscripciones se extendieron hasta el 8 de marzo.

No obstante lo anterior, El Mercurio señala que “fuentes conocedoras del proceso señalan que, más allá del número de afiliados que consigan, el sindicato será constituido de todas maneras”. Dichos informantes explican el sindicato será inscrito a comienzos de marzo y que existe un plazo de 90 días para que la Inspección del Trabajo presente objeciones, pudiendo declarar nula la organización, aunque este proceso no sería inmediato.

El impulso a este nuevo referente sindical surgió tras la huelga legal de los trabajadores de Escondida del año pasado que terminó sin acuerdo tras una paralización de 44 días. Por ello, en junio de este año deberá llevarse a cabo una nueva negociación colectiva.

De acuerdo a lo que señala El Mercurio en su edición de ayer miércoles 21, la inscripción de la nueva organización sindical ha sido más lenta de lo esperado y junto con extenderse el plazo de votación, ésta ya no se realizará en faena, pues ha habido denuncias de intimidación a los trabajadores por parte de integrantes del Sindicato N°1 para no apoyar al nuevo referente.

De este modo, los trabajadores interesados son quienes deberán acudir a las sedes provinciales de la Inspección del Trabajo en Iquique, Antofagasta y La Serena para inscribirse en la nueva organización gremial.

En cuanto a una posible negociación entre este eventual nuevo sindicato y la empresa, los dirigentes de la nueva agrupación no reconocen acercamientos, pero – según afirma El Mercurio- “fuentes cercanas señalan que sí existieron encuentros entre ejecutivos y trabajadores para explorar una negociación colectiva anticipada”.

Estas voces afirman que habría una pre propuesta que incluiría “un mantenimiento de parte importante de los beneficios contenidos en el contrato colectivo y se habla de un bono de término de conflicto de alrededor de $16 millones por trabajador”, de acuerdo a lo que consigna el Mercurio.

La cifra es superior a la oferta de cierre que hizo Escondida en la negociación del año anterior, donde el bono propuesto ascendió a los $11,5 millones.

Aunque esta potencial propuesta despertaría interés entre los trabajadores, muchos de ellos creen que no es factible negociar anticipadamente, de acuerdo a lo que informó el Sindicato N° 1 de Escondida, que argumenta ser la organización “dueña” del contrato colectivo.

A pesar de ello, el abogado laboralista de la Sofofa, Luis Lizama, estima que el nuevo sindicato tendrá otro instrumento colectivo, más allá de que se fragmente de uno anterior: “Me parece que desde el punto de vista jurídico no habría ningún inconveniente en que el nuevo sindicato pueda negociar colectivamente ya sea en forma reglada o no reglada cuando estimen pertinente”.