Comunicado por el Día Internacional de la Mujer Trabajadora

Este 8 de marzo se conmemoró una vez más el Día Internacional de la Mujer Trabajadora. Para las trabajadoras de la minería, es un día particularmente importante, ya que solo desde 1996 que formamos parte de este rubro como trabajadoras reconocidas por la legislación laboral, rubro al cual, sin duda, hemos aportado con innovación y las más variadas aptitudes. 

Sabemos que la oportunidad de trabajar en la industria minera permite a las mujeres obtener una remuneración por sobre la media -considerando los bajos sueldos de nuestro país-, y de que esto también implica autonomía económica, lo que mejora nuestra calidad de vida en cuanto desarrollo personal y también en cuanto al acceso a bienes y servicios.
Sin embargo, también sabemos que la industria sigue en deuda con nosotras y que hoy nos toca dar la batalla, no solo por mejores condiciones laborales, sino que porque estas mejoras sean con enfoque de igualdad. Identificamos falencias en temas de equidad, igualdad salarial, participación en cargos de representación y de toma de decisión, salud laboral, protocolos de acoso sexual laboral, y así muchos otros, por lo que tenemos la certeza que se debe avanzar a que la mirada de la igualdad sea transversal en la industria.
Si bien cada día es más difícil escuchar a alguien decir que las mujeres traen mala suerte en la mina, -mitos que, en su momento, justificaron mantener a la mujer alejada del rubro- sí es fácil escuchar como impedimento para contratar a mujeres el uso de licencias de maternidad, de derechos de lactancia, o una supuesta menor capacidad física. Esta mirada debe erradicarse completamente.
La industria minera debe asumir un compromiso social con las mujeres, y este debe reflejarse mediante la vinculación con las comunidades, para entender el impacto de la industria en las mujeres, en las dueñas de casa, las estudiantes, las familias de los trabajadores y trabajadoras. 
También es el llamado a nuestros compañeros, desde la organización de trabajadores se deben generar alternativas de participación democrática que fomenten la participación de las mujeres, en los pliegos de las negociaciones colectivas DEBEN, incluirse las demandas de la igualdad y se debe generar una cultura de no discriminación en la minería.
Creemos que es urgente avanzar en políticas de corresponsabilidad en la minería, de no discriminación en la contratación de trabajadoras, en la promoción de perfiles de trabajadores que incluyan a mujeres en la creación de nuevos cargos, en la obtención del Sello Iguala Conciliación, en la creación de planes estratégicos en la minería con enfoque de género, en la promoción y respeto de los derechos de maternidad, en la revisión de las jornadas horarias por cómo impactan en las dinámicas familiares, en infraestructura diferenciada para hombres y mujeres, en salas de lactancia acordes a la dignidad y el derecho a la vida de la madre y de los hijos. En definitiva, hablamos de transversalizar las políticas de género en la minería.
Este nuevo 8 de marzo es importante poner sobre la mesa el cómo nos imaginamos un mundo mejor para nosotras, y creemos que hacerlo desde nuestro trabajo es un buen comienzo.
Pamela Bordones.
Presidenta Sindicato Compañía Minera Candelaria
Encargada Mesa de Género  de FESUMIN.
Trabajadora.