Especial Reforma de Pensiones Parte 4: ¿Qué visión tiene Fesumin?

Desde Fesumin, su Director de Comunicaciones y también Secretario del Sindicato de Supervisores de Collahuasi, Víctor Riesco, realizó un profundo análisis sobre la reforma de pensiones y todos los pilares detallados en las notas anteriores de este Especial. 

“En la mayoría del mundo moderno el sistema de pensiones está organizado bajo  tres pilares fundamentales y que dependen de los factores económicos presentes en el mundo laboral.  En este caso son los trabajadores, cuyo aporte personal es la base en nuestro país del sistema y que alcanza el 10%”, comienza Riesco. 

“También existe el aporte estatal que se ve reflejado actualmente en lo que corresponde a la PGU y esto depende de dineros que salen de las arcas del Estado y que ayudan a financiar aquellas bajas pensiones y que eventualmente deberían ir a todo el mundo asegurando un piso para que las personas puedan tener algo de previsión una vez que ya dejen el mundo laboral”, agrega. 

Riesco afirma que “A nivel mundial existe un tercer pilar en este tema  que es el aporte de los empleadores, y que en Chile no existe. Abiertamente se dice que el 10% es el aporte a los trabajadores, pero de una u otra forma también se ha dicho que son los empleadores que a través de la forma de aporte al trabajador son los que pagan este tema.  Pero formalmente, es el trabajador es el que pone su 10%,  y el empresariado de los diferentes tipos, ya sea, grandes empresas, empresas estatales o pymes no están aportando el tercer pilar para el sistema de pensiones, independiente de la forma que exista, en este caso en Chile no existe”. 

“Es difícil poder analizar punto a punto, ya que la realidad chilena difiere bastante desde las grandes empresas, que por ejemplo, cotizan dentro del IPSA en la bolsa de Santiago a aquellas empresas como pueden ser las medianas y pequeñas que desarrollan actividades dentro del país. Por ejemplo, una persona natural que desarrolle labores de trabajo, es muy difícil que ellos mismos se auto impongan y prefieren dejar el efectivo al bolsillo más que guardar dinero para su previsión. Es una situación en que nadie puede ir en contra de su desarrollo, pero han habido cambios en la ley para que estas personas se impongan y puedan acceder a los sistema de beneficio ya sea de pensiones o de salud”, explica. 

El Director de Comunicaciones, afirma que “En definitiva, lo que nos falta en este país y lo que se espera es que el empresariado coloque su parte, que en este caso debería ser un 6% para que las personas puedan obtener una mejor pensión. Desde el punto de vista de los trabajadores no nos parece que esto sea gradual y que llegue al 6% en un periodo de 5 años, que es lo que se propone, ojalá fuera de inmediato, pero no va a suceder de esa forma”. 

“La mirada desde el mundo del trabajo es que realmente las pensiones siempre tienen que construirse en base a los fondos y a los sueldos. En Chile sabemos que los sueldos son muy bajos y por ende cualquier modificación que se quiera hacer, tiene que tener en consideración la proyección de este tema”. 

“Las cifras pueden hablar de promedios, pueden hablar de porcentajes, y pueden ser bastantes llamativas en algunos sectores, pero no en todos. Pensar que entre el sueldo mínimo actual que es de $400 mil y el tope de base imponible que son alrededor de 2 millones cien mil pesos estamos hablando de 1 a 5 en proporción de lo que se está guardando para el futuro y más del 80% de la masa laboral está bajo los 500 mil pesos”.  “Entonces, los montos siguen siendo escuálidos comparados con aquellas personas que tienen un mejor ingreso como puede ser el caso nuestro de la minería”. 

Riesco explica que “La figura no habla bien, porque a futuro seguiremos estando bajo la misma instancia de que los porcentajes que recaudan, ya sea el 10% de ahorro obligatorio del trabajador, y el 6% impuesto por el empleador no alcanzan a suplir las necesidades que actualmente tienen las personas. Es importante también destacar que las personas una vez que dejan la vida laboral sus ingresos bajan en forma drástica y aquellos que pudiendo estar ganando una buena cantidad de plata, entiéndase sobre  1 millón de pesos, o que puedan suplir sus necesidades, se ven mermados en sus ingresos dado que las condiciones de pensión son los resultados de la pensión o los resultados de los fondos de pensiones que también son bajos”. 

“Esta discusión recién comienza, es necesario darle una vuelta bastante larga, ojalá las discusiones no las tengamos en varios años, sino que lleguemos a una pronta resolución de este tema y que esto funcione para la mayoría del país y no solamente para algunos sectores, porque aunque no lo queramos las realidades chilenas son muy distintas dependiendo de los sectores donde se trabaje y tampoco hay que dejar de lado que las perspectivas económicas del presente año y del 2023 no se vislumbran de buena forma y eso va a jugar en contra de cualquier situación que se quiera realizar”. 

“Esperemos que los empresarios no se justifiquen en los costos de su aporte y comiencen a despedir personal, lo cual el remedio sería peor que la enfermedad”, finaliza Riesco.