Oficialmente, son cinco personas fallecidas por acción directa de agentes del Estado y un total de 18 durante estos días de manifestaciones en todo el país, además de decenas de denuncias de abusos, violencia, heridas por armas de fuego y hasta violencia sexual.
Ante esta situación la Federación de Supervisores de la Minería Privada, Fesumin, declara su más grande rechazo y repudio a estas violaciones. “No es posible que en pleno 2019, a décadas de terminada la dictadura, los militares y Carabineros de Chile no hayan aprendido la lección y sigan cometiendo los mismos errores. Es increíble que a estas alturas de la vida y de la civilización, todavía existan víctimas, y que las Fuerzas Armadas se tornen en contra del pueblo que juraron proteger”, aseguran.
“Es inconcebible que tengamos a cerca de dos mil personas detenidas sólo por manifestarse. Que haya más de 200 niños, niñas y menores de edad detenidos y sufriendo violencia por ejercer su derecho a manifestarse”, agregan.
Según el reporte entregado por el Instituto Nacional de Derechos Humanos, INDH, hasta el 22 de octubre había un total de 269 personas heridas y 137 de ellas, heridas por armas de fuego. “Esto no es una broma. No es posible que las Fuerzas Armadas estén realizando y cometiendo los mismos errores que en dictadura. No podemos permitir que esto siga ocurriendo, porque no es posible que salgan a la calle a matar y a herir al pueblo que juraron proteger”, afirman.
El Instituto Nacional de Derechos Humanos ha presentado 21 acciones judiciales en favor de 53 personas “y se están preparando varias acciones más”.
Desde Fesumin, hacen un llamado a la unidad social y a que todas las personas puedan denunciar cualquier tipo de irregularidad o falta a los derechos humanos en manifestaciones.
“Hacemos un llamado a denunciar. Esperamos que nadie se quede en la complicidad del silencio y que estas acciones no queden impune. Es un derecho que el pueblo de Chile tiene a manifestarse de forma pacífica y esperamos que ese derecho sea respetado. El pueblo sólo está pidiendo justicia y equidad para que la vida valga la pena y esa es una petición legítima”, finalizan.