“Golpeado con” sigue siendo la mayor causa de muerte en minería

A pesar de que el año 2015 la minería anotó una baja en cantidad de accidentes fatales, desde el año 2000 hasta el 2015 fueron 525 trabajadores los que perdieron la vida en su lugar de trabajo la mayoría de ellos al ser golpeado con elementos contundentes.

Por: 4 Ojos Comunicaciones 
En un periodo de 15 años, fueron 169 los trabajadores mineros quienes perdieron la vida al ser golpeados con una roca. Otros 86 trabajadores cayeron desde altura, mientras que un grupo de 71, murieron por desbarrancamiento. Por ser aplastados o apretados, 45. Otros 40 mineros fallecieron al ser golpeados por otros elementos. Las causas suman y siguen.

A pesar de la muerte de todas estas personas, el Ministerio de minería anunció como “buena noticia” del rubro a comienzos del año pasado, que en el año 2015 la cifra de accidentes fatales en minería se redujo a 16 personas. Fue calificado en el momento como un balance “positivo”, al tener en cuenta que desde el 2000 en adelante la cifra no bajó de los 25 trabajadores fallecidos, en 2012 y 2013, según las cifras entregadas por el Servicio Nacional de Geología y Minería de Chile, Sernageomin.

Con respecto a este año, hasta junio 2017, la cifra ha caído considerablemente, con un total de 9 fatales, entre ellos, los dos trabajadores, Jorge Sánchez y Enrique Ojeda, en el derrumbe de la Mina Cerro Bayo.

Uno de los puntos en que las organizaciones de trabajadores han puesto énfasis, es en la ratificación del Convenio 176 de la Organización Internacional del Trabajo, OIT, que guarda relación con salud y seguridad en minas.

En el documento, el Estado se comprometería a buscar la forma y elementos propicios, tales como mayor fiscalización, para asegurar el resguardo, seguridad y salubridad de los trabajadores. Sin embargo, hasta hoy, el Estado de Chile no se ha pronunciado al respecto.

Al respecto, el Director de Comunicaciones de FESUMIN, Miguel Fernández Marambio, aclara: “El Convenio 176 de la OIT es una necesidad. Nuestros colegas se están muriendo en sus lugares de trabajo, y un Estado no puede permitir que este tipo de acontecimientos siga ocurriendo. En 16 años han sido más de 525 trabajadores. 525 vidas, personas que ya no están con sus familias, porque causan externas influyeron en sus muertes. Esto se puede prevenir, y una forma de hacerlo, es ratificando el Convenio 176 de la OIT”.