Desde el 1 de abril entró en vigencia la nueva ley que pretende incluir en la fuerza laboral a las personas con algún grado de situación de discapacidad. Las empresas tienen deberes que cumplir, pero ¿cuál será el rol de los sindicatos?
Por 4 Ojos Comunicaciones
La normativa establece que todas las empresas públicas y privadas, de 100 o más trabajadores, deberán contratar al menos un 1% de trabajadores en situación de discapacidad, o bien realizar donaciones a fundaciones o asociaciones relacionadas al área.
Entre los objetivos de esta ley también se encuentra la derogación del artículo N° 16 de la Ley N° 18.600, el cual permitía pagar menos del sueldo mínimo a los trabajadores en esta condición. Con esta nueva reglamentación, se les concibe como personas sujetas de derecho e iguales ante la ley.
La medida vendría a disminuir la brecha salarial de un 32% en desmedro de personas en situación de discapacidad, además de emplear a cerca de un 57% de adultos con discapacidad que se encuentran inactivos, según datos del Segundo Estudio Nacional de la Discapacidad del año 2015.
En este contexto, el Presidente de la Federación de Supervisores de la Minería Privada, Carlos Zurita, señaló que existe un un nuevo rol que el sindicato debe asumir en materia de colaboración con los trabajadores que ingresen por esta nueva normativa, ya que las empresas deberán asegurar las condiciones propicias para que ellos se desarrollen de forma completa, el rol del sindicato, en este caso será el de colaborador.
“Esta nueva ley nos propone un nuevo desafío también como trabajadores, ya que tenemos que ser parte del cambio y adquirir un rol colaborativo, inclusivo y fiscalizador. Porque las empresas deberán adecuar las condiciones tanto de infraestructura como de accesibilidad para que las personas en situación de discapacidad puedan desempeñarse bien”, señaló.
“En cuanto al rol fiscalizador, tendremos que asumirlo ya que al velar por las óptimas condiciones laborales, este es un factor que ahora se incluye. Debemos ver si las empresas cumplen con su cuota y también formar parte de este proceso transformándonos en facilitadores que promuevan el compañerismo y las condiciones laborales dignas para todos los trabajadores. Es un rol bastante importante que creo que los sindicatos desde ahora también tendrán que desempeñar”, finaliza.