Fesumin y otros representantes de CTMIN se reunieron con el presidente de Suceso, Diego Hernández, y el gerente general, Felipe Celedón, para tratar algunos temas de vital trascendencia para la minería nacional y aclarar la postura de los trabajadores, que para la Sociedad Nacional de Minería era de conflicto y de poner trabas a las empresas.
“El objetivo de la reunión era plantarles cuatro temas que tienen que ver con las diferencias entre el año 2016 y 2017 al registrar las muertes que existen, tanto con información como en la informalidad, porque hay dos fallecidos que no tienen contrato de trabajo”, comenzó a relatar el presidente del Sindicato de Supervisores de Caserones, y actual Director de Desarrollo Organizacional y Legal de Fesumin, Pablo Luttecke.
“El otro tema era construir una base de datos de lo que tiene Sernageomin y Suceso porque hay diferencias sustanciales. Y para terminar con ellas sería bueno tener una base de datos y en eso probablemente la Sonami nos puede ayudar”, agregó.
Asimismo, agregó que se trató el “trabajo pesado, básicamente porque las empresas que han logrado poner este tema están cotizando un 4 por ciento más, ese 2% por ciento extra que pone el trabajador básicamente se va al poder jubilar anticipadamente. Pero qué va a pasar con el otro 4% adicional que plantea el Gobierno que deben cotizar todas las personas, aunque digan que será de cargo del empleador, ¿pero veremos qué pasa ahí?”.
«Por último, se habló de poder llegar un acuerdo para que Chile firme el Convenio 176 de la OIT que tiene que ver con las fatalidades en la minería, el que no se ha querido firmar», agregó Luttecke.
Al respecto, manifestó que “una de las ideas que ellos tienen es que si Chile cede a firmar el Convenio, básicamente le pondrá más regulaciones a la pequeña minería. Porque según Diego Hernández sí estamos cumpliendo y estamos más avanzados de lo que ordena el 176. Yo no comparto esa visión, pero el señor dice que estamos mucho mejor que el resto de los países, algo que no es así porque a nivel nacional básicamente se hace prevención sólo para no aparecer en la estadística y no importan las fatalidades».
Tras la cita, el dirigente recalcó que «se sacan hartas conclusiones. Primero, que Sonami nos veía como un ente que le pone problemas a las empresas, cuando el fin último de los Sindicatos de Profesionales es que les vaya bien, y cómo sucede eso, respetando las leyes, al trabajador. Creo que las altas gerencias todavía no entienden que cuando podamos darle tranquilidad al supervisor y romper los paradigmas de dejar de vernos como el enemigo, recién ahí se podrá hacer un cambio».
En cuanto a la relevancia de la participación, expresó que «es importante que Fesumin esté en este tema porque mientras más gente y socios podamos sumar, podemos optar a tener mejores opciones para que nos escuchen. Se nos mira sólo por los números y lo que podamos ganar, seguimos siendo el jamón del sándwich cuando creo que siempre hemos querido ser aporte, tanto para la empresa como para la sociedad».