Tras el cierre de planta de contenedores, el holding naviero Maersk Container Industry, fueron 1209 los trabajadores que quedaron sin trabajo en San Antonio.
La causa argumentada fue la sobreproducción de contenedores refrigerados en el mundo, y la falta de “la falta de materias primas a nivel regional para fabricar”, factores que “hacen inviable la operación”, según una carta enviada a los trabajadores despedidos.
“La viabilidad de la fábrica no es posible, debido a la aparición de nuevos fabricantes y a la falta de suministro local de insumos esenciales para producir, lo que nos hacía poco competitivos”,
Desde el sindicato N°2, su presidente, Alejandro Villatoro, señaló que “Siempre existió esa amenaza y sí se hablaba de un despido masivo, de unos 300 trabajadores, pero nunca pensamos que iba a ser el cierre total de la empresa. Pero nosotros iniciaremos las acciones que correspondan de acuerdo a la visión que nos den nuestros abogados y ahí veremos qué hacemos para defender los derechos de los trabajadores. Aquí se han vulnerado desde siempre, se nos ha tratado como esclavos”.
Por su parte, desde el sindicato Nº1, el presidente Carlos García, acusó a la compañía de ocultar información. “Probablemente en Europa se hubiera dado un trato bastante más decente, más coherente, más culto, en el sentido de permitir la responsabilidad social que corresponde en este tipo de situaciones y no avisarle al trabajador a última hora que ya no tiene su fuente laboral y que se las arregle como pueda (…) Nos dejaron en la calle de un día para otro, esa es la verdad“.